La gente sigue eligiendo las playas del balneario para desconectarse. El clima acompañó y hay expectativa. Ansían que el movimiento de público persista a lo largo del mes, pese al contexto económico adverso.
Arrancó enero y con él la etapa más linda del año, porque empiezan las vacaciones y con ellas la posibilidad de disfrutar del relax y del tiempo libre. Los que aman la playa ya están gozando del mar de Las Grutas, que recibió el 2024 con todo. Este año, por el difícil contexto económico, existen menos reservas que otros para el primer mes de la temporada. Pero el movimiento de público fue intenso durante estos días y mucha gente llegó para despedir el año y arrancar su receso en el destino.
Es que la costa invita más que nunca, con un corredor de playas para todos los gustos y la posibilidad de realizar excursiones y paseos.
Además, están el resto de las plantas urbanas, que componen San Antonio Oeste y aportan su encanto particular. En SAO hay balnearios agrestes como Los Tamariscos, o colmados de atractivos naturales como La Mar Grande, que seduce con sus flamencos rosados y su diversa avifauna.
En la villa portuaria están La Conchilla (esa playa blanquísima por la presencia de restos de caracoles) y también Punta Perdices, popularmente conocida como el “Caribe de la Patagonia”, que atrae con su mar color esmeralda y sus cielos inmensos.
Pero volviendo a Las Grutas, las playas céntricas. como es habitual, son las que más traccionan, y, desde la primera a la séptima, están organizadas en bajadas que permiten que los que bajan a disfrutar del agua tengan cerca un parador con servicios y entretenimiento asegurado.
En la primera bajada están las tradicionales grutas que le dan nombre al destino, ideales para tomarse una selfie. La tercera se caracteriza por el movimiento náutico, porque de ella parten las tradicionales “bananas” o potros de mar, a las que se suman las lanchas que llevan a los turistas al punto donde se realizan bautismos de buceo, y también paseos embarcados.
En la séptima los chicos cuentan con un tobogán de agua, que atrae toda la atención. Mientras que en las que están ubicadas hacia el acceso norte, como Terraza al Mar o La Rinconada, se dan excelentes piques y son más tranquilas, para disfrutar del entorno sin tantas distracciones.
Pero si la idea es una desconexión total lo ideal es apuntar hacia el sur. A 5 km hacia esa dirección desde el centro se encuentra Piedras Coloradas, y, a partir de allí, una sucesión de lugares agrestes a los que hay que acudir con todo lo necesario para pasar el día, porque no cuentan con servicios.
Pero, a cambio de esa falencia, en ellas la naturaleza se muestra a pleno y llena de vida. Siempre cuentan con menos público y son las elegidas por aquellos que buscan la calma en estado puro, y rincones bellos para alejarse de todo.
Con relación al arranque del verano la villa turística comenzó a experimentar ingreso de turistas desde el viernes 29, cuándo muchos comenzaron a llegar para despedir 2023 y recibir 2024 en la playa. Por eso se espera que el movimiento continúe el resto de la temporada, y que tal vez, motivados por el buen clima, muchos elijan “escaparse” para disfrutar de la arena, aunque hasta el momento no lo hayan planificado.
“Las reservas vienen en baja, pero estamos esperanzados. El comienzo de año hará que muchos decidan viajar a último momento. Confiamos en que pueda incrementarse la gente, sobre todo la que está en lugares o provincias vecinas” manifestó Carlos Rivas, que es el referente de la asociación de extrahoteleros, que es la que más camas le aporta al destino.
Lo cierto es que, como cada verano, Las Grutas se vistió de alegría para recibir a los viajeros y las postales que refleja la costa invitan a sumarse a ellos, que ya están gozando del sol y de la arena.
Por otra parte, las altas temperaturas le pusieron su cuota extra a los días al aire libre, para que no haya excusas y los primeros chapuzones de la temporada estén compartiéndose y disfrutándose a pleno.
PARA TENER EN CUENTA
Los que busquen alojarse en Las Grutas deberán saber que existe una baja en los precios anunciados tiempo atrás, aunque es probable que, debido a los escasos índices de ocupación, los valores sigan descendiendo.
Por caso, las sumas de referencia que dio a conocer la asociación de extrahoteleros (que es la que nuclea a los dueños de departamentos y complejos) varió.
Ahora, con ese ajuste, un departamento para 4 (una pareja y dos chicos) relativamente cerca de la playa con todos los servicios que antes se cotizaba a $60.000 está $50.000, y entre $30.000 y $40.000 una de las mismas dimensiones, pero en la periferia de la villa.
Sin embargo, como esos son costos referenciales, muchos de los prestadores, ante la escasez de turistas, están bajándolos mucho más. Y hasta existen páginas de Facebook en las que se contactan los que quieren viajar y ofrecen las sumas que pueden pagar, para escuchar ofertas de los comerciantes.
En materia de comida, si la idea es degustar pescados y mariscos en los restó que se extienden por la peatonal un abadejo al verdeo con papas rústicas está $8900, un lenguado grillé con risotto al parmesano $8900, el salmón rosado con papas $16.500, la merluza con guarnición $6.600. La porción de vieyras gratinadas $8600 (al igual que la ensalada de mariscos). Las rabas se cotizan $5900, los langostinos a la romana $6200, lo bastones de merluza $4500 y la picada para dos $19.700. (Fuente: Diario Río Negro).