Desde la visión de la Senadora Nacional argentina, Silvina García Larraburu, "La Patagonia en general y ciudades ícono como San Carlos de Bariloche, vuelven a sentir la presencia de las denominadas "temporadas bajas", asestando una dura realidad a los trabajadores y trabajadoras de la actividad, y por ende a las economías regionales que pierden meses vitales de un calendario turístico anual".
"Los números registran que el turismo internacional en Argentina ha retrocedido a niveles de hace ocho años atrás, reflejando una preocupante baja en la llegada de visitantes de diversos países, limítrofes y europeos", asegura la Senadora.
"Las políticas públicas sobre actividad turística habían logrado desactivar la baja, manteniendo un equilibrio durante todo el año. Esto ya no existe, lo que lleva a los actores de esta actividad a promover y vislumbrar nuevas ideas y estrategias en un país que no da tregua a la recesión y al vaciamiento del circulante interno de dinero".
García Larraburu señaló que "desde el sector privado, se señalan varios factores como causas principales de esta caída. Uno de los aspectos más resaltados es la inflación en dólares, que ha erosionado el atractivo económico de Argentina como destino turístico. Además, las políticas nacionales han jugado un rol crucial en la pérdida de competitividad del país en el segmento receptivo".
"Un análisis más detallado revela que el aumento inesperado en las tarifas de entrada a los Parques Nacionales, los precios del combustible y las tarifas exorbitantes de servicios esenciales como la luz y el gas ha contribuido significativamente a esta situación. Estos incrementos no solo afectan a los turistas en particular sino a la actividad en general, encareciendo los costos operativos para los proveedores de servicios".
La senadora argentina sostuvo que "La depreciación del dólar MEP, entre otros factores económicos, también ha influido negativamente, encareciendo la experiencia turística para los extranjeros. Esta combinación de factores ha resultado en una notable pérdida de competitividad para Argentina, un país que históricamente ha sido un destino destacado en América del Sur".
"Los trabajadores y trabajadoras hoy viven una gran incertidumbre y ven limitados sus meses de ingresos. Es imperativo que el Poder Ejecutivo Nacional junto al sector privado trabajen para diseñar políticas y acciones que restauren la competitividad del país, revitalizando así una industria crucial para la economía nacional", concluyó García Larraburu.