La maravillosa excursión al Glaciar Torrecillas, que se encuentra situado en el Parque Nacional Los Alerces, es una de las experiencias incomparables para realizar desde la ciudad de Esquel en estas vacaciones de verano.
La expedición combina navegación y trekking, para contemplar a este ventisquero que tiene más de veinticuatro mil años, formado durante la última glaciación, posibilitando al visitante presenciar este majestuoso acompañante de la naturaleza.
Estar frente al glaciar es contemplar la inmensidad del hielo en las alturas, conviviendo en un ambiente de ecología y biodiversidad en estado puro. Es un paraíso de turismo sustentable en estos ecosistemas de extrema fragilidad de la Cordillera Patagónica.
El Glaciar Torrecillas es un tesoro que nos ha legado la última glaciación en la Patagonia Argentina y es una de las bellezas que conforman el Parque Nacional Los Alerces, siendo unas de las atracciones favoritas de Esquel en la provincia del Chubut.
A diferencia de los más conocidos glaciares de la Argentina el Torrecillas es de tipo “circo”, porque se forma sobre la montaña, dando la impresión que cuelga de la misma. Cuenta con una parte superior “limpia” bien blanca y una parte inferior “sucia” producto de los sedimentos que se van depositando.
A los pies del Torrecillas se despliega la Laguna del Antiguo, con un color esmeralda intenso, desde donde se puede apreciar las cuencas que le dieron origen al hielo glaciar hace más de 24.000 años en la última Glaciación.
Este lugar es el punto máximo de aproximación al Torrecillas, luego de la navegación y posterior caminata de bajo impacto, con la finalidad de ayudar en la conservación del entorno, dentro de un marco de la sustentabilidad siempre presente.
PATRIMONIO MUNDIAL
En el mes de Julio de 2017, el Parque Nacional Los Alerces fue declarado Patrimonio Mundial sitio Natural. Dicha declaración fue realizada por la UNESCO dado a las extraordinarias condiciones naturales que posee el parque. El paisaje, la flora, la fauna, la belleza natural y su valor universal excepcional, son los motivos principales que se han tenido en cuenta para alcanzar el máximo galardón de este sitio con respecto a su conservación a nivel mundial. Hoy el Parque Nacional Los Alerces es parte de la herencia común de la Humanidad y debe ser protegido para las próximas generaciones.
EL COMIENZO DEL PASEO HACIA EL TORRECILLAS
El recorrido inicia con una hermosa caminata por un sendero de interpretación de 1,5 km. hasta el Puerto Chucao a orillas del lago Menéndez, cruzando la pasarela colgante que atraviesa el bello Río Arrayanes con aguas de color turquesa, el cual une los lagos Verde y Futalaufquen, rodeado de bosque nativo.
Tras recorrer el pintoresco sendero en el cual se puede reconocer la flora y fauna del lugar mediante cartelería explicativa, apreciar cada árbol señalado, y tomar fotografías desde los miradores y descansos, se llega al Puerto Chucao.
Allí se puede hacer un alto en el camino para hacer tiempo antes de comenzar el trayecto navegable, aunque es recomendable llegarse hasta el mirador desde el cual ya se puede visualizar el Torrecillas a la distancia, para que la ansiedad de la llegada se acreciente.
NAVEGACIÓN Y TREKKING HASTA EL GLACIAR
El trayecto navegable tiene una duración de 45 minutos aproximadamente y se atraviesa el lago Menéndez hasta llegar al Puerto Nuevo. Durante la excursión la embarcación realiza maniobras de ubicación, para la captura de fotografías panorámicas desde del agua, facilitando la obtención imágenes de calidad inolvidables.
Al desembarcar solo resta la caminata de ascenso, de nivel medio, que se realiza en aproximadamente 1:30 – 2 hs, donde la selva Valdiviana es la acompañante de la aventura, mientras los excursionistas atraviesan un hermoso arroyo de deshielo, trepan las laderas ayudados por sogas y llegan a la Laguna del Antiguo, el final del recorrido. Allí, a tan solo 500 metros de distancia se encuentra el tan esperado Glaciar Torrecillas.
Los guías brindan charlas y explicaciones acerca de la flora, fauna, historia y glaciología general de la región, al tiempo que se observan alerces, tineos, cipreses, coihues, lengas, cañas y otros ejemplares propios de la selva valdiviana, también muchas veces es posible encontrar en el camino, como guías en las alturas, a los cuidadores del lugar, los Cóndores.
La excursión tiene una duración total de entre cuatro y seis horas y es posible realizarla en cualquier época del año, siempre y cuando el clima lo permita. La misma se contrata en las agencias de turismo local, ya que el acceso a la base del Glaciar se encuentra estrictamente controlado, para evitar erosionar el lugar.
Esta es otra experiencia turística de excelencia que propone el Parque Nacional Los Alerces y Esquel para el regocijo de los viajeros, conviviendo con el ambiente natural, y tomando conciencia de su preservación.