Hace pocos días estuvimos visitando la ciudad de Osorno y tuvimos la oportunidad de conocer un espacio único y mágico. A pocos minutos del centro de la ciudad. Llegamos a Santuario Patagonia, un hotel boutique con mucha tradición y emplazado en un edificio con mucha historia. Una casona de estilo arquitectónico moderno, de más de mil metros cuadrados diseñada por el premio nacional de arquitectura Don Carlos Buschmann, el año 1949, hoy se ha convertido en un espacio que con sus más de 7 hectáreas de parque, bosques y jardines, nos permite aislarnos del ritmo de la ciudad y literalmente descansar, desconectarse de todo.
Las habitaciones del Santuario Patagonia Hotel Boutique son amplias y luminosas y cuentan con suelo de parquet y muebles elegantes. Todas tienen baño privado y balcón. El restaurante del Santuario Patagonia, el Pilauco Kaffee, sirve platos exquisitos y el desayuno es un espectáculo aparte. Todo es casero. Cada producto está elaborado en el propio establecimiento y esa calidad se nota. Se disfruta.
Como ejemplo y a modo de recomendación, les decimos que no se pierdan dos momentos mágicos: el amanecer y el atardecer en los balcones o en el jardín, de cara a un parque pleno de verde, flores y animales que viven en total libertad y le dan al escenario un tinte de mágico.